EL ORIGEN DEL YO
“En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios” (Juan 1:1)
En el principio el “Yo” no existe, solo existe el “nosotros”.
El tiempo hace que nazca el “Yo”, y el “nosotros” es comprendido sólo como la primera persona del plural.
“Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del hijo, y del Espíritu Santo. (Mateo 28:19).
El misterio de la Santísima Trinidad nos devela que el “Yo” no existe en la divinidad, que en ella solo existe el “nosotros”.
La trimurti hindú son la unión de tres dioses: Brahmá, Visnú y Shiva.
Aunque los dioses de la trimurti son adorados por separado, ellos son siempre tres, son un “nosotros”.
La diosa Hécate, simbolizada por tres cabezas representando cada una de ellas a una diosa:
Hécate, la madre muerte, Diana, la madre naturaleza, y Selene, la madre luna, es la representación del Eterno Femenino en un “nosotras”.
El origen religioso es politeísta, “nosotros”, y más tarde en el tiempo se transforma en monoteísta, el “Yo”.
Cuando el ser humano se aleja de la divinidad, deja de ser “nosotros” y nace el “yo”, el ego.
¡No hay que confundir el “yo” con la individualidad sagrada!
El “yo”, el agregado psicológico, es la negociación del “nosotros” universal.
El “yo” es el separatismo, el “nosotros” es la universalidad.
El “yo” es el egoísmo, el “nosotros” es el compartir.
El “yo” es el amor propio, el “nosotros” es el amor universal.
La capacidad de compartir es la medida con la que podemos observar la manifestación del “yo” o del “nosotros” en nuestra existencia diaria.
A más capacidad para compartir, menos “yo” se manifiesta, y a menos capacidad para compartir, más “yo” se manifiesta.
¡El amor es compartir!
¡El “yo” es competir!
Cuando el “nosotros” se expresa la consciencia planetaria se incrementa, dando como resultado la armonía climática.
Santiago Barberán
09/06/2022
CONFERENCIA: EL ORIGEN DEL YO
Gracias, que pequeña nuestra capacidad para grandiosidad y el amor del Universo
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