AUDIO LIBRO NUT - CAPÍTULO DIECISÉIS - EL RAYO DE LA MUERTE

AUDIO LIBRO NUT - CAPÍTULO DIECISÉIS - EL RAYO DE LA MUERTE 

25.05.2025 

La muerte física es el cese de toda actividad orgánica, y por lo tanto la anulación de los cinco sentidos físicos.  

 El último sentido que pierde el ser humano al desencarnar es el oído. En según qué filosofías, cuando un ser humano desencarna, el Maestro le entrega las últimas indicaciones al oído.  

El acto más parecido a la desencarnación es el dormir, y éste es necesario para vivir, y con la muerte sucede lo mismo.  Si un ser humano no desencarna no puede vivir una nueva existencia. La vida consta de 108 existencias.  

 Dormir y morir es un viaje anímico. En el primer caso se vuelve de nuevo al cuerpo físico, y en el segundo caso ya no se vuelve de nuevo utilizar el mismo cuerpo.  El esoterista se prepara cada noche para el viaje llamado dormir, porque necesita de las experiencias que va a recibir el alma, alejada del cuerpo físico. 

En el caso de la desencarnación, el esoterista se prepara para este viaje durante toda la existencia, para que en la próxima existencia lo recuerde todo. 

Soñar es un estado de conciencia. El sueño indica un estado de conciencia dormida. En estado de vigilia también se puede estar en un estado de conciencia dormida. 

Cuando se desencarna, la conciencia también puede encontrarse en el estado de conciencia dormida. El estado de conciencia de la esencia puede ser dormida o despierta. 

Estar despierto es ser consciente en estado de vigilia, de descanso y desencarnado. La esencia no puede de nuevo volver al cuerpo físico cuando ha desencarnado, pues el cordón de plata ha sido cortado. 

Los sueños entregan cierto tipo de información. Mediante el estudio de los sueños se puede conocer el centro de gravedad psíquico.  Cuando el centro de gravedad cambia, los sueños también cambian. 

Los Maestros del Rayo de la Muerte son los seres despiertos que tienen la misión de cortar el cordón de plata.  En según qué cultura estos Maestros son simbolizados de una forma u otra. En ocasiones son vistos como esqueletos portando una guadaña o una espada.  

Uno de los animales que se relaciona con la muerte es el cuervo. El número tarotista que se relaciona con la muerte es el 13.  Un árbol relacionado con la muerte es el ciprés. La estación que se relaciona con la muerte es el otoño. 

Cuando el ser humano desencarna, tres principios quedan atrapados en el mundo tridimensional, el cuerpo físico, el cuerpo vital y la personalidad. El ego y la esencia se elevan a la cuarta y quinta dimensión. 

Los rituales funerarios ayudan a la esencia del desencarnado, dándole luz, calor y fuerza.   

 

Santiago Barberán